– Una taza de mantequilla de cacahuate (Utilizar de preferencia aquella que no tiene azúcar añadida, ni trocitos de maní).
– Una cucharada pequeña de bicarbonato de sodio.
– Dos huevos grandes batidos ligeramente.
– Una taza de azúcar regular.
Precalienta tu horno a una temperatura promedio de 325 °C. Coloca dos rejillas. Una en el tercio superior y la otra en el inferior. Luego en un recipiente de tamaño mediano mezcla la mantequilla de maní, el azúcar, el carbonato y los huevos. Cuando obtengas una consistencia uniforme forma pequeñas bolitas de masa. (Aproximadamente que deben caber de 18 a 20 galletas por charola.
Un tip para que no se te peguen es utilizar una placa de silicón en vez de enharinar la charola.
Hornéalas durante 15 minutos, checando paulatinamente para verificar si todas las galletas se están dorando de forma pareja. Déjalas enfriar y disfrútalas con un refrescante vaso de leche fría.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario